Para realizar por unos minutos algunas maniobras de práctica que forman parte de sus protocolos de actuación en
caso de complicaciones con los migrantes, los elementos de la CBP usaron cascos y escudos y también utilizaron una
bomba de gas lacrimógeno.
Los socorristas cerraron la carretera de acceso durante unos minutos para realizar algunas maniobras de ejercicio
que forman parte de sus protocolos de actuación en caso de complicaciones con los migrantes.
Estos ejercicios se habían realizado anteriormente y se retomaron recientemente debido al elevado número de
migrantes centroamericanos y caribeños en Nuevo Laredo.
Los ejercicios se realizan a veces sin previo aviso, y sólo se notifica a las autoridades mexicanas con unas horas de
antelación.
En este caso, el personal de la CBP estaba equipado con cascos y escudos, así como con un bote de gas lacrimógeno.
Tras el ejercicio, el tráfico se reabrió unos minutos después para los usuarios del carril central y para los peatones.
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