A casi un año de la desaparición de los ingenieros, sus familiares y amigos criticaron la lentitud de la investigación y
la falta de avances.
“Estoy buscando a mi novio Ricardo Valdés Elizondo, que desapareció con su amigo Jorge Arévalo”, explicó Jesica González de la Rosa.
“Pues no hay ningún avance, todo es papeleo, todo son oficios, cosas que tienen que hacer de acuerdo a la ley, los pocos avances que hacen son pistas que no siguen, líneas que no agotan, y nos informan a nosotros, los familiares, después de cuatro o cinco meses, cuando ya no podemos hacer nada.”
Según González de la Rosa, la última localización GPS conocida de los móviles de los dos jóvenes es en el barrio de
Alijadores de Nuevo Laredo.
Sin embargo, Valdés y Arévalo, así como el vehículo en el que viajaban y sus celulares, no han sido encontrados.
“El auto de mi compañero aún no fue localizado, su celular no estaba encendido y el de Jorge tampoco. Al principio estaba encendido, había movimientos, pero no se hizo nada para localizarlo, por lo que esta línea de investigación tampoco está activa todavía”.
La prometida de Arévalo agregó que ni el gobernador de Nuevo León, Samuel García, ni su homólogo de Tamaulipas,
Francisco Javier García Cabeza de Vaca, han respondido a las peticiones de los familiares de los desaparecidos.
“Todo se ha quedado en promesas de que nos van a recibir, de que vamos a tener una reunión, incluso la última vez que el gobernador (García) nos recibió, dijo que haría una llamada para que el gobernador de allá (García Cabeza de Vaca) nos recibiera, pero no, en realidad sólo fue que nos dijo palabras bonitas en ese momento para tranquilizarnos, y no pasó nada.”
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